martes, 20 de septiembre de 2016

Soy una mamá koala :) Mi experiencia con el porteo hasta ahora.

Hola!

He vuelto!
Perdonad que querría haber escrito este post antes, pero con Bruno no saco tanto tiempo para sentarme frente al ordenador!

Hoy quiero hablaros de mi experiencia con el porteo (de hecho mientras os escribo tengo a Bruno en la mochila, ya que le encanta y se queda súper dormido).


Me habéis hecho miles de preguntas sobre las mochilas que uso, sobre el fular, sobre mis sensaciones al portear... ¡Espero contestar a todo aquí!

Antes de nada, aclarar que os voy a hablar de mi experiencia personal. Como hay muchísimos portabebés ergonómicos más de los que voy a mencionar, al final del post os dejo algunos links a tiendas que os pueden ser de utilidad ya que hay mil posibilidades.

Desde antes de nacer Bruno tenía muy claro que quería portear. Había leído sobre el tema, sobre cómo aporta seguridad al bebé, ya que cuando le porteas estás, en cierto modo, repitiendo las condiciones en las que estaba en el vientre materno (en constante movimiento y oyendo la voz de su mamá y el latido de su corazón). También lo veía muy práctico, ya que te deja las dos manos libres para seguir haciendo cosas mientras estás cerca de tu bebé. Por último, aunque habíamos elegido un carrito todoterreno (el Bugaboo Buffalo), hay rutas en el campo, cerca de casa, que me tenía claro que quería recorrer junto a Bruno y que son demasiado estrechas para un carro y con demasiadas irregularidades y piedras.

Total. Que estaba decidida.

Así que antes de dar a luz me fui haciendo con un par de portabebés.

Lo más importante para mí era buscar que fueran ergonómicos. Aunque parezca mentira, hay muchos portabebés en el mercado (¡de marcas muy conocidas!) que no lo son y que no respetan la posición natural del bebé. Si queréis un poco de información sobre este tipo de mochilas sólo tenéis que hacer una búsqueda en google sobre "mochilas colgonas" y os quedará claro!


Para que sepáis reconocerlos: los portabebés ergonómicos son aquellos que respetan la posición natural del bebé (que se denomina "de ranita" y que puedes reconocer porque la espalda del bebé hace una C y sus piernas una M). Es importante que las piernas del bebé no cuelguen, que su espalda esté sujeta y que el peso no recaiga sobre el bebé.

Hay un montón de portabebés ergonómicos: fular elástico, fular tejido, bandoleras, fular de anillas, mei tai, mochilas portabebés... Yo os recomiendo que investiguéis bastante en internet porque hay mucho que elegir.

Yo lo primero que me compré fue un fular elástico. Se lo encargué a la hermana de Lucas cuando estaba en EEUU y me lo trajo de allí. La marca es Cuddlebug y, aunque está bien, lo cierto es que es muy grueso y no muy elástico, lo que hace que en verano sea un poco agobiante. Después de nacer Bruno, y visto el calor que hace, me he hecho con otro fular, de BluMum, que es mucho más elástico y además es bastante fresquito.

Lo bueno del fular elástico es que se puede usar sin problemas desde el nacimiento. Es súper cómodo, no aprieta por ningún lado y el bebé va súper recogidito junto a tí. Lo malo es que hay que aprender a hacer el nudo básico. Hay muchos videos en youtube pero es cierto que cuesta un poco pillarle el truco y que, aunque es bastante sencillo hacerlo con un muñeco (¡yo practiqué mucho así), otra cosa es hacerlo con tu bebé, sobre todo cuando es recién nacido. Yo lo uso casi siempre cuando estoy en casa, ya que aún me cuesta hacerme el nudo con soltura y meter fácilmente a Bruno. Por eso me gusta ponérmelo cuando tengo un espejo delante, la verdad. Para estar por casa también me gusta la camiseta portabebé de Amarsupiel que es como un fular pero en forma de camiseta. Para salir a la calle aún no la he usado porque es muy gruesa y con el calor que ha estado haciendo...


También me compré una mochila portabebés. Hay mochilas que se pueden usar desde el nacimiento (Marsupi, Emeibaby, Manduca...) y otras que son a partir de los 6 meses (Tula, Boba...) aunque  algunas de ellas también se usan en recién nacidos con un adaptador.

Tras mucho mirar elegí la Ergobaby Adapt porque se puede usar a partir del nacimiento sin necesidad de usar un adaptador. Es cierto que me costó un poco al principio ya que hay que hacer varios ajustes y me hice un poco lío (así que me quedaba Bruno muy bajito en la mochila hasta que puse bien todos los ajustes) pero sinceramente, es súper cómoda. Reparte muy bien el peso de Bruno y no te cansas nada. Es realmente práctica.

Además de la Ergobaby Adapt, Lucas y yo decidimos comprarnos la Marsupi Breeze para los días más calurosos de verano, que es otra mochila pero de lino, ya que la Ergobaby, entre que es de algodón y que es negra, nos daba bastante calor. La Marsupi Breeze es perfecta desde el nacimiento, si bien me parece que al no tener ninguna estructura, será más cansada de llevar según Bruno coja peso.


Confesaré que en el armario tengo también un fular de anillas de Tula que me regalaron mis tías, preciosísimo, pero que me resulta más complicado de colocar. Espero atreverme pronto.

Como véis, hay un montón de opciones, y yo sólo he mencionado tres!!! Os recomiendo que visitéis una tienda especializada o que echéis un ojo online (hay muchas: elultimokoala, kangarunga, porteame.com, etc).

En todo caso, sea lo que sea que elijáis, es muy importante que antes de poner a vuestro bebé os aseguráis de que es el correcto para su edad y peso. También que todos los nudos (si lleva nudos) o cierres estén correctamente colocados (de hecho, yo os recomendaría practicar con un muñeco antes, para cogerle el truco). Además es muy importante que siempre os fijéis que vuestro bebé tiene las vias respiratorias despejadas y que su barbilla nunca esté tocando su pecho.

Yo sólo puedo deciros que en este mes y medio me he enamorado del porteo. Me encanta tener a Brunito siempre cerca mío y muchos días en casa él se echa la siesta como si fuera un cangurito mientras yo ordeno su habitación, trabajo en el ordenador o preparo la cena! Comencé con miedo e insegura por si la postura era correcta, por si Bruno estaba cómodo... pero desde la primera semana le cogimos el truco y ahora no hay día que no portee a Bruno, en casa o en la calle. Me lo llevo en la mochila a todos lados: a caminar, a hacer la compra, a eventos, a reuniones... Lo bueno de tener tanto carrito como portabebés es que puedes ser mucho más versátil y elegir según la situación: por ejemplo, para ir a comer a un restaurante me llevo el carrito porque comer con el portabebés es más incómodo (aunque lo he hecho! jaja), sin embargo para ir a hacer la compra o para salir de paseo con Leadville voy más cómoda con el portabebé.

Además, a Bruno le alivia mucho los gases estar en vertical, y lo cierto es que cuando está en la mochila se queda súper frito y se calma siempre que está un poco llorón. ¡Muchos días pasa directamente de la mochila a la cuna y está tan feliz!

Bueno. Que menuda chapa os he soltado. ¡Espero que os sea útil!

Un beso!

Alma




martes, 6 de septiembre de 2016

Nuestro primer mes de lactancia materna exclusiva, ¡así nos ha ido! :)

Hola!

Yo por aquí de nuevo. ¡¡No me puedo creer que Bruno ayer cumpliera un mes!! Ha sido un mes emocionante, muy cansado si, y de cambio total de vida, pero un mes precioso en el que cada día vemos cambios en el pequeño Bruno... ¡se nos cae la baba mirándole! Es TAN bonito.



Vaya, que en este post os quería hablar un poco de cómo estamos llevando la lactancia, que sé que es un tema que despierta interés. Intentaré pronto (cuando saque un minuto) contaros cómo me he sentido yo a nivel físico y emocional este mes, y también otro de nuestras primeras experiencias con el porteo :)